Hay una cantidad creciente
de evidencia que muestra que el consumo de granos enteros o
integrales (“whole grains” en inglés) y de productos derivados
de éstos está asociado a una reducción del riesgo de desarrollar
muchas enfermedades, incluidas las enfermedades
cardiovasculares,(2-4) hipertensión (5,6), accidentes
cerebro-vasculares, síndrome metabólico y diabetes de tipo 2 (7,8,
9-11) y diferentes tipos de cáncer (12, 13). Aunque los cereales,
y en particular los hidratos de carbono que contienen, han sido
implicados como parte del problema de la actual epidemia de obesidad,
los estudios muestran que el consumo de granos integrales (GI) puede
ayudar en el control del peso corporal (14-17)
Cada vez es más evidente
que los GI tienen la capacidad de mejorar nuestra salud más allá de
la simple provisión de energía y de nutrientes macro. Este es el
inicio de una serie de posts acerca de las principales funciones de
los granos integrales y sus beneficios para la salud. Para ello será
necesario revisar los principales componentes químicos que pueden
ejercer efectos funcionales y luego avanzar hacia el examen de los
efectos que esos componentes funcionales tienen sobre la salud
humana.
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1 comentario:
Deberían enseñarnos más de esto en la escuela, no? realmente es importante saber que comemos, qe deberíamos comer.
No solo que nos hagan practicar ejercicios past continuous. Sino que nos enseñen como ser seres saludables. QUe opinan?
De todas formas gracias por esta info, muy util
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